Johnny Depp declaró durante cuatro horas hoy en el juicio que le enfrenta a Amber Heard, su expareja.
El actor demandó a Amber Heard por 50 millones de dólares para "limpiar mi nombre" después de que su exesposa lo acusase en 2018 de "abuso doméstico".
"Mi objetivo es la verdad. Un día eres Cenicienta y luego eres Quasimodo. Yo no merecía eso y mis hijos tampoco", dijo Depp en Fairfax (Virginia, EE.UU.) el primer día de declaraciones.
Por su parte Amber Heard ha presentado una contrademanda en la que acusa a Depp de impulsar una campaña de difamación contra ella y le reclama 100 millones de dólares.
En el segundo día de declaraciones Johnny Depp relató que Amber Heard le agredió físicamente en en varias ocasiones, llegando a lanzarle en 2015 en Australia una botella de vodka que le provocó varios cortes en los dedos.
Al mirarse la mano se dio cuenta que había perdido la yema de un dedo, lo que le provocó un estado de shock que le llevó a escribir con su propia sangre en las paredes.
"Miré hacia abajo y me di cuenta de que me había cortado la punta del dedo. Estaba mirando directamente a mis huesos, que sobresalían", explicó Depp.
Cuando fue al hospital mintió para proteger a Amber Heard y dijo había tenido un accidente con una puerta.
Según Johnny Depp su exmujer Amber Heard bebía en exceso (dos botellas de vino cada noche), consumía drogas (MDMA, hongos y anfetaminas) y le amenazó con suicidarse durante varias de sus peleas.
En el juicio Johnny Depp contó el incidente fecal que sufrió después de una cena de cumpleaños podo después de separarse, cuando se encontró heces humanas junto a su cama: "Lo encontré tan extraño y tan grotesco que sólo podía reír".
Según el actor la responsable del incidente fecal fue Amber Heard, que culpó a los perros de defecar junto a la cama del actor.
Depp explicó que sus animales eran muy pequeños y no hacían deposiciones de ese tamaño.